Hidratarte mejora la digestión, la energía y la concentración.

Caminar al menos 30 minutos al día reduce el riesgo de enfermedades crónicas.

Un buen descanso fortalece el sistema inmunológico y mejora el estado de ánimo.

Aportan vitaminas, fibra y antioxidantes esenciales.

Previene el contagio de virus y bacterias.

Ayuda a prevenir hipertensión y diabetes.

Habla con alguien de confianza, haz actividades que te relajen y busca ayuda si lo necesitas.

Son factores de riesgo para muchas enfermedades.

Estira tu cuerpo cada 2 horas para evitar dolores y mejorar la circulación.

Usa protector solar, ropa adecuada y evita exposición prolongada.

Es una forma segura y efectiva de prevenir enfermedades graves.

Detectar a tiempo es clave para tratar muchas enfermedades.

Evita pantallas por periodos prolongados, usa iluminación adecuada y acude al optómetra.

Cepíllate después de cada comida y visita al odontólogo cada 6 meses.

Incluye proteínas, carbohidratos complejos y grasas saludables.

Practica técnicas como la respiración profunda, el yoga o la meditación.

Siempre consulta con un profesional de la salud.

Tener horarios para dormir, comer y ejercitarte mejora tu calidad de vida.

Protege tu sistema respiratorio, especialmente en temporada de lluvias.

Compartir con familia o amigos mejora el bienestar emocional.